"...y me atacó el viento como si quisiera decirme algo, como si quisiera que me diera cuenta, a Fuerza, de...algo...no se qué..."
El día de hoy me hablaron de "el alma". Pero me hablaron de ella como si ya supiera qué es. Y la verdad es que no tengo idea de lo que es, sin embargo, ¿el alma se vive, siente, ve y huele? Eso mismo fue lo que me pregunté y le pregunté a Gabriela. Ella me respondió que el alma no se puede ver y que en tantos años de humanidad, nadie ha encontrado al alma como algo material. Dijo que el alma está con uno mismo, es decir, está dentro de tí y que puede que la tengas o no dependiendo de tu forma de vida en el aspecto espiritual. No lo comprendí del todo, así que ella me puso un ejemplo: "...la gente comúnmente busca compañía porque no podemos vivir solos, en soledad. Es por eso que se buscan amigos, una pareja para que nos sintamos queridos, compañeros de trabajo o de clase, etc. No sólo buscamos todo esto porque nos sentimos solos sino porque tal vez estamos tristes, tenemos problemas, nos sentimos vacios y sin un objetivo en la vida. Entonces todas esas soluciones son soluciones efímeras, es decir, momentáneas, porque al final, nos sentiremos igual que al principio..." No estuve muy de acuerdo en eso porque al compararme a mi con todo lo que me dijo, pues esque yo tengo amigos y se que sin ellos no podría vivir, pero no los busqué porque me sentía sola o sin objetivos en mi vida. Así mismo, no tengo una pareja, pero no me muero por encontrar a una, ya que hay mucha más gente que me quiere. Entonces le dije que cómo era posible saber que tu vida iba bien si todo lo que has querido está frente a ti en muchas ocasiones. Gabriela se notaba muy tranquila y me respondía inmediatamente después de hacerle una pregunta, eso me asombró porque yo me notaba muy insistente.
Ella me respondió que muchas veces creemos saber qué es lo que queremos pero aunque tenemos mucha felicidad y todo eso, puede que existan dudas en tu mente o que sientas como si algo faltara aunque no sepas qué es. Me habló de Dios entonces. Dios te muestra el camino que debes de seguir, se para frente a tí y te dice que te estás desviando, que sólo buscas respuestas erróneas y que él viene para mostrarte tu camino o que te des cuenta de lo que debes buscar. Ahí volví a interrogarla: "¿hablas de Dios como una persona o como un "algo" que existe en algún lugar...?" Gabriela me contó unos versículos de la Biblia que hablaban de ello (les notificaré en otra ocasión esa parte de la Bliblia porque ahora no lo recuerdo). En ejemplo, además del anterior, me dijo que Dios es como el viento, es como el alma; el viento es como el alma. No se ve, no es material, pero sí lo sientes, lo hueles porque consigo arrastra aromas, y lo más importante, lo vives. Entonces compendí que Dios no va dentro de una religión internacional, sino que existe en tú religión , en tu mundo espiritual y que se te presenta cuando más lo necesitas, cuando meditas, cuando razonas, cuando perdonas, cuando lloras, cuando sonríes, cuando logras tus metas, cuando dudas, cuando sólo estás ahí, en una banca sentado viendo el panorama y pensando mil cosas y en nada a la vez...
...cuando llega el viento y te pega fuerte y después aparece alguien y te pide 5 minutos de tu tiempo sólo para razonar ciertas cosas y te habla en un tono que te invita a tranquilizarte y a pensar en qué es lo que realmente quieres y necesitas para que seas completamente feliz o lo más allegado a eso.
El alma...es esa chispa que te hace vivir a diario, ese objetivo que sigues con anhelos, esa familia que te acompaña cada día, esos amigos que nunca te abandonarán, esos valores que te hacen crecer como humano y todo. El alma es sentir que estas vivo: hueles, sientes, ves...y en un caso extraodinario... tocas. Esa séría la culminación del alma, esa sería el alma...la culminación, la culminación de tu vida...cuando sientes... que la tocas .
"...no se qué. Se calmó el viento y entonces llegó ella pidiéndome un momento de tiempo, un momento de mi vida, pra platicar y comenzar el camino hacia mi culminación..."
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